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lunes, mayo 16

NEOLIBERALISMO IRREVOCABLE PARA ESPAÑA.


NEOLIBERALISMO IRREVOCABLE PARA ESPAÑA.

Tiene que suceder un milagro para que en 2012, en las elecciones generales de España no gane el Partido Popular.

Cuando el perro está de malas, todo se le vuelve pulgas, dice un popular aforismo. Zapatero cometió el error de no avisar que la burbuja inmobiliaria tendría un final y que estaba cerca. En esos ambientes presidenciales, tanto es España como en otros países europeos, los arribistas conservadores y liberales, de izquierda y derecha, tienden a dar palmaditas en la espalda al jefe y decirle que “todo” va muy bien…

Se supone que las oficinas económicas de las presidencias están para evitar eso. Pero las entidades mundiales, las de calificación de riesgos, las de calificación de riesgos bursátiles, el Banco Mundial, el Fondo Financiero Mundial, todos, fallaron en sus predicciones.

Solo cuando se cae Goldman Sach en 2008, es que todos comienzan a frotarse los ojos. Como si fuera la primera crisis financiera mundial. Se podría acusar de “pardillos” a todos esos lustrosos barones de las finanzas mundiales. Comenzando por el presidente de los U.S.A., a la sazón el conservador Bush Jr., quién no tuvo mejor acción que aplicar su consabido plan de no poner dinero federal para salvar empresas privadas….pues finalmente Estados unidos tuvo que poner sobre la mesa más de 7 mil millones de dólares para salvar a la banca americana.

Europa tuvo que hacer lo mismo al arrancar 2009…como ese dinero salió de las arcas nacionales de cada país y de Europa, ahora no hay dinero para nadie….pero cuidado…aquí se pone en marcha la forma de hacer beneficiosa la crisis para los bancos y las grandes fortunas: Contengamos el gasto. Todas las políticas sociales son un gasto. Darle dinero a las empresas es inversión….

Los fenómenos financieros siempre estuvieron presentes. En nuestras narices se sucedieron cosas rarísimas al estilo de lo que Madov hizo en USA. En España, la estafa a los ahorradores encima estuvo a punto de poner al estado español a pagar los platos rotos. En una clara política de la extrema derecha, como culpar a los comunistas del incendio del Raichtag.

El escándalo de la mega-estafa en los casos Afinsa y Forum Filatélico en España, en 2006, dejó claro que las normas no son equilibradas para los detentadores del capital y para los clientes de a pie. De la misma manera, se ha dejado en el imaginario colectivo que las pérdidas hay que socializarlas y las utilidades sí son asunto privado y muy privado.

En definitiva, se trata de una pérdida de calidad democrática de occidente, pero que es dirigida a voluntad, de tal manera que se acepte como un fenómeno físico, un fenómeno natural y que debemos aceptar como la lluvia. No es culpa de nadie. Es así y punto.

Quienes somos críticos con la sociedad de nuestros tiempos no aceptamos eso. Tiene que haber culpables intelectuales de todo esto. No puede ser sucedan cosas como el estallido de una crisis financiera de tal magnitud, sin que ella sea usada en beneficio de alguien, ya sea un grupo de países o una entidad supranacional.

Esa entidad supranacional, como la gran Europa, la Unión Europea, está formando en el seno de una nación librepensadora, libre de ataduras intelectuales, propias del pasado no muy lejano, sobre las cenizas de la segunda guerra mundial y del fascismo, un nuevo eje de potencias “modernas”, pero del mas rancio sabor fascistoide, xenófobo, revisionista y profundamente revanchista. Dicen esas nuevas potencias que no los volverá a pillar la locomotora izquierdista y esta vez han venido para quedarse.

En 2012, España será de una derecha como la de Francisco Franco en 1936. Pero con los tintes “modernos” que no deja ese sabor de la España Nacional Católica.

Francia, la del Sarcozy hiper quinético, con su revisionismo del tratado de Schengen, quiere frenar eso de que los europeos se muevan libremente por toda la unión. Además, que los extracomunitarios, los ciudadanos que han venido a la prometedora Europa, tengan los mismos derechos. Anatema que hay que corregir. Hace poco, echó a los gitanos pobres y rumanos de Francia, como si ellos no fuesen europeos de pleno derecho.

Finlandia, en un acuerdo con sus partidos de la extrema derecha, ya ha cerrado el libre tráfico de personas a la vecina Alemania.

La Alemania de Angela Merkel, en una enloquecida carrera contra los malos resultados electorales, da una de cal y otra de arena. Merkel ha perdido su norte y está dando palos de ciego. La contestación interna es muy fuerte y vive aún el recuerdo de un pasado nazi, recordado con melancolía unos y con espanto otros. Alemania es una caldera de sentimientos encontrados.

La Italia del mafioso Berlusconi poco deja a la imaginación. Ese personaje está todo el tiempo tratando de esconder sus miserias y no sabe como hacerlo. Por lo tanto está en una posición cínica, como el ladrón que es pillado in fraganti, y descaradamente niega que la bolsa que tiene en la mano es producto de su fechoría.

Dinamarca, la de las viñetas contra Mahoma, con un fuerte sentimiento fascista en las filas de sus partidos conservadores, está en pie de lucha. En cuanto un suramericano o un árabe se sientan en un restaurante, los buenos daneses se ponen de pié y abandonan el local, no sin antes increpar al dueño del negocio. Eso mismo hacían y hacen aún en locales del levante español.

En Inglaterra, donde actualmente se vive un recorte de libertades y de servicios que la clase trabajadora consiguió con mucho trabajo, el gobierno pronto se romperá en pedazos y caerá en manos de los partidos de ultraderecha.

Así pues, ya está expedito el camino de construcción de la nueva Europa de los mercaderes, la Europa “moderna” libre de ciudadanos molestos que quieren reivindicar libertades y servicios sociales. Ahora, ya todo es “libre”. Libre de ser muy rico y de pagar a los trabajadores salarios de hambre. Los estados ahora tendrán más dinero para invertir en obras civiles faraónicas que den trabajo a las empresas que dejan enormes beneficios a sus dueños y paguen a los trabajadores los salarios que los “mercados” determinen.

Hace poco, con la más natural de las desvergüenzas, la operadora Telefónica, publicó las utilidades de 2010 y al mismo tiempo presenta un plan de despidos de personal. Se desprenden de, dicen sus directivos, el mayor de sus activos: los trabajadores.

Pero el trabajo no estaría completo si no hubiese un plan de creación de nuevos y jóvenes políticos. Aquellos que harán frente en un cercano futuro a esa desenfrenada tarea de la izquierda de atacar a los estados y el sagrado nombre de Dios y las instituciones que promocionan la creencia en altos principios evangélicos.

De tal manera, el candidato a una alcaldía de Cataluña, Badalona, presenta el peligro que corren los españoles con la inmigración que les arrebata sus puestos de trabajo. Es solo un ejemplo, pero por todo el país, el partido Popular Español y otros partidos xenófobos gastan enormes esfuerzos en presentar batalla a los inmigrantes. La gran mayoría de los inmigrantes en España están regularizados, pero los políticos de turno lo llaman inmigración ilegal. Precisamente los inmigrantes ilegales no ocupan puestos que los españoles ambicionan. Son en su casi totalidad negros quienes han venido en pateras y que venden películas y música bajadas de Internet, trabajo ilegal y delictivo que sí es ejercido por españoles que tienen en sus casas hasta 5 y 6 o más ordenadores que trabajan las 24 horas y luego utilizan redes de inmigrantes ilegales o no, suraméricanos principalmente, que sirven personalmente los productos que son requeridos por el consumidor. Los ilegales solo corren huyendo de la policía que los acosa por temporadas.

Para hacer irrevocable este viaje al totalitarismo de derecha, una de las tareas es bajar constantemente los impuestos para dejar las arcas públicas sin recursos para mantener el estado de bienestar. Es lo más sencillo de trabajar, pues los dineros para obras pública y para la seguridad del país están incuestionablemente a salvo.

Recordemos que pasó con el Estado de Wisconsin, en USA, que por leyes estatales, se prohibió que los trabajadores estatales estuviesen sindicalizados. Estas leyes, impulsadas por los republicanos, hicieron que los senadores demócratas se fueran a estados limítrofes para entorpecer el quórum necesario.

Cosas similares debe estar preparando el grupo de Aznar, el expresidente español que estando en el extranjero, dijo ante la prensa, que España no podía pagar las deuda externa y que los mercados acreedores deberían desestimar prestarle dinero al gobierno español. Perfecta acción de traición de lesa patria.

Aznar tiene un grupo de estudios llamado FAES, que algunos piensan que es propaganda subliminal de la Falange Española de Francisco Franco. Desde allí, los fascistas de Aznar preparan las cosas para evitar que pase lo de 2004, cuando un atentado terrorista en Madrid, pésimamente manejado por Aznar y sus ministros, hizo que la masa votante le diera la presidencia del gobierno a José Luís Rodríguez Zapatero.

Tiene que hacer las cosas para que si es posible desaparezca la idea de que una vez hubo un partido de izquierda llamado PSOE, y el PP gobierne por lustros sin la menor contestación.

Estos días, sucede algo a Dominic Strauss-Khan, que vaticiné para Obama o para Zapatero.

Es pronto aún para determinarlo, pero todo parece indicar que este político del partido socialista francés intentó violar a una trabajadora de su hotel en New York.

Si esto ha sido una trampa, es del más puro teatro del absurdo de la realidad a la que nos estaría empujando la derecha extrema europea.